La agorafobia es una enfermedad en la que el paciente tiene miedo a las situaciones de las que sería difícil escapar: los grandes espacios abiertos, las aglomeraciones de gente en la calle, el tráfico o el transporte; suelen ser las más comunes. Como consecuencia de esta miedo, la persona evita las situaciones temidas, las soporta con gran ansiedad o necesita ser acompañada.
Pueden distinguirse varios componentes en la agorafobia:
- Evitación de situaciones temidas (tanto las situaciones típicas agorafóficas, como aquellas que producen sensaciones temidas)
- Conductas defensivas durante las situaciones temidas, miedo a estas situaciones (ansiedad fóbica)
- Ansiedad anticipatoria (preocupación por tener un ataque de pánico o una fuerte ansiedad, expectativa o anticipación a que esto pueda llegar a ocurrir)
- Miedo al miedo (miedo a las reacciones somáticas de la ansiedad y pensamientos catastróficos)
- Ataques de pánico o síntomas similares a los del pánico (mareo, vómito, molestias cardíacas, pérdida de control de esfínteres….)
Existe una gran idiosincrasia en el número y tipo de situaciones temidas y evitadas en la agorafobia. Algunos ejemplos frecuentes son los cines y teatros, supermercados, clases, grandes almacenes, restaurantes, museos, auditorios o estadios, aparcamientos, lugares altos, lugares cerrados (túneles por ejemplo), espacios abiertos exteriores (campos, patios…) o interiores (grandes habitaciones, vestíbulos…), viajar en autobuses, trenes, metros, aviones, barcos, conducir o viajar en coche (en cualquier momento, o en autopistas y vías rápidas), hacer colas, cruzar puentes, fiestas o encuentros sociales, andar por la calle, quedarse solo en casa, estar lejos de casa….
El miedo y la evitación de las situaciones agorafóbicas son influidos por múltiples factores: distancia desde casa, compañía de una persona, animal u objeto en quien se confía, cercanía a un lugar o zona de seguridad (hospital, consulta médica, salida de un sitio…), número de personas presentes, ocurrencia de eventos estresantes, estado emocional (el enfado puede reducir la conducta de evitación, mientras que la tristeza la aumenta), anticipación de una situación temida, cambios hormonales, toma de alcohol, fármacos o drogas, tiempo atmosférico (el calor y la lluvia pueden ser agravantes). Luz (si es intensa, ya sea solar o artificial, puede ser perturbadora)…. Todos estos factores, que vemos que son múltiples y diversos, influyen en las sensaciones corporales experimentadas, de modo que cuantas más sensaciones temidas aparezcan, más miedo y evitación habrán.
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En los casos más graves, los sujetos pueden pasar la mayor parte del tiempo en casa en compañía de familiares y llegar incluso al enclaustramiento total en casa. El miedo o la ansiedad no aparecen sólo cuando la persona se encuentra en las situaciones temidas, sino también al anticipar estas situaciones. Esta ansiedad anticipatoria puede ser peor que la ansiedad experimentada en la situación temida.
Los agorafóbicos tienen miedo de aquellas situaciones en las que consideran que pueden tener sensaciones somáticas de ansiedad o ataques de pánico o en las que ellos valoran que pueden llegar a ocurrir consecuencias dañinas o catastróficas. Por ello, otro elemento fundamental de este tipo de fobia es el miedo al miedo. Éste tiene dos dimensiones:
1. Miedo a las reacciones somáticas o activación fisiológica asociadas con la ansiedad. Estas reacciones somáticas pueden ser piernas inseguras o poco firmes, tensión, dolor o malestar en el estómago, nudo en el estómago o la garganta, debilidad, visión borrosa, tensión muscular…
2. Cogniciones o pensamientos en los que la persona que las sufre cree o valora que estas sensaciones somáticas de ansiedad tendrán consecuencias dañinas o catastróficas de tipo físico (ataque cardíaco, derrame cerebral, muerte, desmayo, vómito, atragantamiento…), mental (perder el control, volverse loco, quedarse paralizado, hacer daño a alguien…) o social (que la gente piense que uno está loco o es raro, que la gente lo mire fijamente o se ría, balbucear o hablar de un modo raro…)
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Redacción Instituto Draco
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