¿Te resulta difícil sostener el enfoque en tus metas?
Ok, voy a tomar eso como un sí. Quiero que sepas algo… ¡no eres la única persona en el mundo que le pasa!
Un estudio reciente muestra que nuestra capacidad de enfocarnos en una cosa a la vez está bajando. Esto no es sólo causado por las interrupciones accidentales, ¡sino por las distracciones que nosotros mismos nos permitimos! Sí, honestamente a veces buscamos distraernos de nuestros objetivos… ¿increíble no?
Hoy voy a revelarte 3 distracciones que dispersan tu atención. Porque dominar tu atención y enfocarla en los proyectos y actividades que hacen que progreses, comienza por eliminar los hábitos que no ¿Todo listo para revisar esos hábitos? ¡Vamos!
#1: Distraídos en los smartphones
¡Esta es casi obvia! Smartphones y otros dispositivos nos interrumpen con frecuencia. Vibran,zumban, se sacuden, hacen ¨bling!¨, y nuestra atención es capturada por ellos. Dime si no te sucede que recibes un whats’app y no puedes pasar más de 60 segundos sin leer el mensaje y responder.
Y encima cuando ¨nadie llama¨ comenzamos a extrañar la interacción con nuestros dispositivos. Incluso varias veces me descubrí ¨con las manos en la masa¨… Mientras hacía un descanso de mis tareas importantes,automáticamente tomé el smartphone para entrar en Instagram ¡Pillado! Lo cual nos lleva a la segunda distracción…
#2 Distraídos en las redes sociales
Instagram, Twitter, Facebook, y la lista de aplicaciones que reclaman nuestra atención se vuelve interminable. Lo entiendo pueden ser divertidos, y utilizados con moderación, probablemente no tiene nada negativo. Pero eso no es lo que hace la mayoría.
Hay una corriente constante de información por ahí, más de lo que podrías procesar en un solo día, y los científicos descubrieron que no lo estamos manejando bien. Suelo poner el ejemplo de las personas que pasan fines de semanas enteros viendo temporadas de series en Netflix.
¡No malinterpretes! Me encanta el cine, pero aprendí que disfruto mucho más de ver una película cuando bloqueo un espacio libre en mi agenda para hacerlo. Porque puedo disfrutar de la película sin estar pensando que hay otras cosas que era importante hacer, no hice y dejé para después…
Otro ejemplo, cuando estás tratando de hacer algo mentalmente difícil en el trabajo, algo que requiere mayor concentración, y tu mente está constantemente empujándote a revisar comentarios en Facebook en su lugar, y luego vuelves a mirar el trabajo (que te esperaba mientras de pasada hiciste un ¨scrolling¨ por instagram) y piensas ¨ufff… no voy a poder con todo esto¨.
Caíste en el viejo truco anti-productivo de hacer varias cosas al mismo tiempo. Lo cual nos lleva a la tercera distracción…
#3 Distraidos tratando de hacer muchas cosas al mismo tiempo.
Ese hábito desgastante de la multitarea ¿Sabías que cuanto más a menudo cambiamos rápido de una tarea a otra sin completar ninguna, más perjudicial se vuelve para nuestro desempeño?
Estudio tras estudio… tras estudio está probado que no es productivo, ralentiza el funcionamiento del cerebro (como tu computadora cuando tratas de abrir 4 o 5 aplicaciones al mismo tiempo), y fomenta el trabajo de mala calidad. Si, tu y yo lo sabemos. Sabemos que deberíamos hacer primero A, y luego B. Pero igual seguimos adelante y lo hacemos de todas formas, probablemente porque hemos hecho de las distracciones una parte integral de nuestro día de trabajo.
Así que hasta que estamos dispuestos a echar un vistazo a cómo y por qué nos permitimos este tipo de distracciones, será difícil encontrar el enfoque en nuestras metas que precisamos para realizarlas.
Ahora, me gustaría que te sinceres sobre esto:
¿En cuáles de estas trampas de distracción caes más frecuentemente?
¿Puedes darte cuenta como esto afecta en tu rendimiento?
Bien, ahora que ya conoces los efectos que dispersar tu atención produce… ¿Te gustaría incrementar tu productividad, enfocándote en hacer una cosa a la vez?
¿Qué estrategias se te ocurre que podrías usar para evitar estos 3 mecanismos de distracción en tu día?
Por ejemplo, podrías silenciar o directamente apagar tu celular cuando estás realizando una tarea importante que requiere un mayor nivel de atención y es mentalmente dificil.
O podrías bloquear un espacio en tu agenda para dedicarlo específicamente a revisar los emails o interactuar en redes sociales.
Sigue identificando otros hábitos que ralentizan tu productividad… en mi caso he descubierto que a veces nos ¨enganchamos¨ en conversaciones casuales con temas que nos drenan la energía. Por ejemplo, ¡quejarse!
Agustin Andrade
Autor y Comunicador
www.agustinandrade.com